La refrigeración líquida para la infraestructura de IA permite una mayor eficiencia en los centros de datos y las fábricas de IA
Tradicionalmente, los centros de datos han dependido de la refrigeración por aire, en la que enfriadores mecánicos hacen circular aire frío para absorber el calor de los servidores y ayudarles a mantener unas condiciones óptimas. Pero a medida que los modelos de IA aumentan de tamaño y se incrementa el uso de modelos de razonamiento de IA, mantener esas condiciones óptimas no solo es cada vez más difícil y caro, sino que también consume más energía.
Mientras que antes los centros de datos funcionaban a 20 kW por bastidor, las instalaciones de hiperescala actuales pueden soportar más de 135 kW por bastidor, lo que hace un orden de magnitud más difícil disipar el calor generado por los bastidores de alta densidad. Para mantener los servidores de IA funcionando al máximo rendimiento, se necesita un nuevo enfoque para la eficiencia y la escalabilidad.
Una solución clave es la refrigeración líquida: al reducir la dependencia de los refrigeradores y permitir un rechazo del calor más eficiente, la refrigeración líquida está impulsando la próxima generación de infraestructuras de IA de alto rendimiento y eficiencia energética.
NVIDIA GB200 NVL72 y NVIDIA GB300 NVL72 son sistemas de refrigeración líquida a escala de rack diseñados para manejar las exigentes tareas de inferencia de modelos de lenguaje de billones de parámetros. Su arquitectura también se ha optimizado específicamente para aumentar la precisión y el rendimiento durante las pruebas, lo que los convierte en la opción ideal para ejecutar modelos de razonamiento de IA al tiempo que se gestionan eficientemente los costes energéticos y el calor.
Eficiencia del agua y ahorro de costes sin precedentes en los centros de datos de IA
Históricamente, la refrigeración por sí sola ha representado hasta el 40% del consumo eléctrico de un centro de datos, lo que la convierte en una de las áreas más significativas en las que las mejoras de eficiencia pueden reducir tanto los gastos operativos como la demanda de energía.
La refrigeración líquida ayuda a mitigar los costes y el consumo de energía capturando el calor directamente en la fuente. En lugar de depender del aire como intermediario, la refrigeración líquida directa al chip transfiere el calor en un bucle del sistema de refrigeración tecnológico. A continuación, el calor circula por una unidad de distribución de refrigerante a través de un intercambiador de calor líquido-líquido y, finalmente, se transfiere a un circuito de refrigeración de la instalación. Gracias a la mayor eficiencia de esta transferencia de calor, los centros de datos y las fábricas de IA pueden funcionar eficazmente con temperaturas del agua más cálidas, reduciendo o eliminando la necesidad de enfriadoras mecánicas en una amplia gama de climas.
El sistema NVIDIA GB200 NVL72 de refrigeración líquida a escala de rack, basado en la plataforma Blackwell de NVIDIA, ofrece un rendimiento excepcional al tiempo que equilibra los costes energéticos y el calor. Aporta una densidad de cálculo sin precedentes en cada rack de servidores, lo que se traduce en un potencial de ingresos 40 veces superior, un rendimiento 30x superior, una eficiencia energética 25x superior y una eficiencia hídrica 300x superior a las arquitecturas tradicionales refrigeradas por aire. Los nuevos sistemas NVIDIA GB300 NVL72 basados en la plataforma Blackwell Ultra multiplican por 50 el potencial de ingresos y por 35 el rendimiento, con una eficiencia energética 30 veces superior.
Se calcula que los centros de datos gastan entre US$ 1,9 y 2,8 millones por megavatio (MW) al año, lo que equivale a casi 500.000 dólares anuales en costes de energía y agua relacionados con la refrigeración. Mediante la implementación del sistema GB200 NVL72 con refrigeración líquida, los centros de datos a hiperescala y AI Factories pueden lograr un ahorro de costes de hasta 25 veces, lo que supone un ahorro anual de más de 4 millones de dólares para un centro de datos a hiperescala de 50 MW.
Para los operadores de centros de datos y AI Factory, esto significa menores costes operativos, métricas de eficiencia energética mejoradas y una infraestructura preparada para el futuro que escala las cargas de trabajo de IA de forma eficiente, sin la huella de agua insostenible de los métodos de refrigeración heredados.
“Siempre buscamos maximizar los servicios de nuestros socios comerciales, por lo que siempre estamos innovando e ideando formas de aumentarlos. Los centros de datos son uno de nuestros focos de atención, sobre todo porque son grandes almacenadores de energía y necesitan servicios más eficientes y sostenibles”, afirma Marcio Aguiar, director de la división Enterprise de NVIDIA para Latinoamérica.
Trasladar el calor fuera del centro de datos
A medida que aumenta la densidad de computación y las cargas de trabajo de IA impulsan cargas térmicas sin precedentes, los centros de datos y las fábricas de IA deben replantearse cómo eliminan el calor de su infraestructura. Los métodos tradicionales de eliminación del calor que permitían un escalado predecible basado en la CPU ya no son suficientes por sí solos. Hoy en día, existen múltiples opciones para trasladar el calor fuera de las instalaciones, pero cuatro categorías principales dominan los despliegues actuales y emergentes.
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Acerca de NVIDIA
Desde su fundación en 1993, NVIDIA (NASDAQ: NVDA) ha sido pionera en el campo de la aceleración computacional. La invención de la GPU por parte de la compañía en 1999 estimuló el crecimiento del mercado de juegos para PC, redefinió los gráficos por ordenador, inauguró la era de la IA moderna y ha contribuido a la digitalización industrial en todos los mercados. En la actualidad, NVIDIA es una empresa de infraestructuras informáticas completas con soluciones a escala de centro de datos que están revolucionando la industria. Para saber más: Link.
